lunes, 29 de octubre de 2012

¿MAR PARA BOLIVIA?



El conflicto entre Chile y Bolivia tiene ya más de 100 años de duración, pero sus consecuencias nos siguen afectando hasta el día de hoy. Antes de la guerra del Pacífico,   Chile basaba su economía en la exportación del salitre, el cual se encontraba a lo largo del desierto de Atacama. El altercado se inicia cuando el gobierno de Bolivia viola el tratado de 1874, en el que se establecía que   Bolivia no incrementaría los impuestos sobre el salitre por 25 años, es decir, hasta 1899. Pero el tratado no se cumplió ya que Bolivia estaba sufriendo una crisis económica, entonces yo opino que si deberíamos ya que nos ayuda a generar una buena relación vecinal.

Pero sin embargo, con el tratado de 1904, en el cual se define la actual delimitación territorial, se permite a Bolivia tener libre transito comercial a través del territorio chileno, haciendo uso de los puerto del Pacífico. Pero en el presente Bolivia se ve en desacuerdo con dicho documento, e intenta conseguir como mínimo, un corredor de unos 10 kilómetros de ancho que se extienda unos 160 kilómetros desde su frontera con Chile al Pacífico, más un pedazo de costa en la cual desarrollar la actividad industrial y comercial bajo su bandera. Pero para poder llevar a cabo esté plan, no solo es necesaria la aceptación chilena, sino también la peruana, pues implica modificar un tratado bilateral suscrito por esas dos repúblicas.

Según el punto de vista chileno, los problemas económicos bolivianos, no se deben a la falta de un pedazo de la costa Pacífica. Destacan que bajo los preceptos del tratado de 1904 Bolivia tiene acceso libre de impuestos al puerto chileno de Arica y que además Chile pagó y construyó un ferrocarril que enlaza a Arica con La Paz. Por otro lado, para neutralizar la noción de que el Tratado de 1904 fue una imposición del vencedor sobre el derrotado, resaltan que esté fue firmado años después del término de las hostilidades, y que se logró tras una negociación iniciada en marzo de 1902 y fue firmado de acuerdo a los procedimientos normales de las relaciones diplomáticas entre estados.  

Esta situación, deja a Chile en una posición de desventaja ante cualquier circunstancia adversa, sea de carácter regional o internacional, que atente contra: la seguridad del país o el bienestar de la nación y sus habitantes. Sin ir más lejos, una amenaza actual e inmediata se cierne sobre Chile, ante esta   crisis que afecta a todo el mundo, nuestro país se encuentra aislado en su propio continente, sus efectos ya hacen un desperfecto en la economía chilena y   por consiguiente, en nuestra vida cotidiana. Según parámetros de crisis anteriores, el pronóstico del futuro chileno en su actual posición no depara buenos resultados.

De ahí la importancia urgente de que Chile vuelva su atención y fomente las buenas relaciones con sus vecinos, sobre todo aquellos de los cuales puede obtener ventajas comparativas. Chile necesita contar con aliados dispuestos a colaborar con nosotros, lo que en el presente no ocurre, producto de los resquemores históricos de parte de Perú y Bolivia, que impiden las buena vecindad y total cooperación con nuestro país, por el contrario, lo que existe es un profundo resentimiento, y por conveniencia, Chile debe ser el primero en comenzar a resolverlo. Permitir una salida al mar a Bolivia seria un buen comienzo en nuestra búsqueda de buenas relaciones, con ello Chile podrá mostrar un liderazgo con miras a obtener un mercado para sus productos, proveerse de gas y el petróleo de Bolivia y lo más importante, contar con nuevos aliados contra futuros conflictos internacionales. 

Ignacio Redel B.
2º Año C